¿Qué hacer en Pakse?
Pakse es la capital de la región de Champasak y la principal ciudad del Sur de Laos. Debido a su localización especialmente cercana a la frontera con Tailandia, así como las de Camboya y Vietnam, se ha erigido como centro neurálgico de las redes de transporte hacia el sur y el centro de Laos.
Lamentablemente su atractivo turístico no se corresponde con el tráfico del que disfruta, siendo una ciudad aburrida y con los precios bastante inflados.
Las guesthouse más cutres te piden 50.000k, por lo que vale la pena pagar un poco más y hacerse con una habitación con agua caliente y wifi por 60.000k; en nuestro caso fue en el hotel Lankham, si bien hay otros con similares características y precio.
La moneda local es el kip, donde 1 euro son actualmente 10.400 kips. 60.000 kips equivalen a 6€.

Los restaurantes son bastante mediocres y se concentran, así como los hoteles, al comienzo de la Road 13, cerca del puente y a 2 Kilómetros del mercado donde paran los songthaews que llegan desde la frontera con Tailandia. Otra parada de autobuses se encuentra 6 Kilómetros más alejada del centro turístico, lo que beneficia a los conductores de tuk-tuks.

El único restaurante “diferente” que encontramos era un indio llamado Jasmin, nada del otro mundo pero mejor que el resto de restaurantes que probamos en Pakse, las raciones son pequeñas y el precio superior a aquellos indios en los que habíamos comido en Malasia, Tailandia o Singapur.

En la orilla del río encontramos un puestecillo con mesas con vistas al Mekong y muy buenos batidos de frutas de inmensas dimensiones, su precio además era más que razonable: 5000 kips.
Y es que en Pakse, aparte de comer, dormir o coger un autobús, barco o songthaew; no hay mucho más que hacer. Podemos visitar los templos (Wats) que hay en la ciudad, echar un vistazo a un museo que no despertó nuestro interés, caminar por la orilla del Mekong y ver el atardecer, aprovechar para visitar el gimnasio en el Champasak Palace Hotel o tomar unas cervezas.

¡Feliz año nuevo!