Can Tho: la capital del delta del Mekong
Desde Saigon continuamos dirección Sur hacia el delta del Mekong. Nuestro centro de exploraciones lo establecimos en Can Tho, la mayor ciudad de la zona y desde donde resulta bastante fácil acceder a varios mercados flotantes.
Se trata de una ciudad activa y comercial, con un tráfico fluido y pocos turistas. Motivo por el cual la oferta turística es reducida, así como las opciones donde alojarse o comer con un menú en inglés; pero la carencia de extranjeros permite encontrar puestos locales con precios locales, siendo posible comer y comprar sin que intenten vaciarte la cartera constantemente.
En Can Tho nos alojamos en el Hotel 31, situado en 31 Ngo Duc Ke. Las habitaciones son decentes y amplias, y el coste de las mismas es de 6 US$.
El precio es aceptable tratándose de Vietnam, y con la mejor relación calidad precio que encontramos en dicha ciudad, pero los propietarios del hotel son muy insistentes respecto a tours; y la comida allí es muchísimo más cara que en los puestos locales.
Es posible comer por unos 15.000 dongs un buen plato de arroz con las verduras, carnes o pescados que te apetezcan en un restaurante local con trato amable situado en So 9 De Tham, prácticamente enfrente de la estación de autobuses urbanos.
Aprovecho para recordar que 1 euro equivale a 27000 dongs, por lo que 15.000 dongs son unos 55 céntimos de euro.
A la orilla del río podemos encontrar también muchos tenderetes orientados, principalmente, al turista. Allí podemos hacernos con zumos de azúcar de caña, huevos cocidos y fruta fresca; un kilo de jackfruit –pelado y preparado para comer- me costó unos escasos 30.000 dongs. Además se trata de un excelente lugar para disfrutar del amanecer.
En Can Tho, también, aproveché para enviar una de las postales solicitadas por uno de nuestros lectores, que ya recibió hace unos días. Esta vez el servicio postal vietnamita funcionó con rapidez, no como la postal que envió Ilze nada más entrar en el país, que todavía no ha llegado a Letonia.
A la mañana siguiente madrugamos para hacernos con un bote que nos llevara por los entresijos del delta del Mekong y con el que visitar los mercados flotantes vietnamitas, de los que prometo multitud de fotografías en el próximo artículo.
