Vacunas puestas para Asia

Vacunas para Asia: la fiebre amarilla

Uno de los motivos para volver a España era ponernos todas las vacunas pertinentes y recomendables antes de emprender nuestro camino a Asia.

Por Europa estuve viajando sin preocupación respecto a posibles enfermedades o accidentes, a fin de cuentas el regreso a España para tratarse cualquier problema que surgiera era bastante fácil y rápido. Por no llevar no tenía ni la tarjeta sanitaria Europea.

Dado que marchamos a Asia pero que no tenemos ni idea de a donde iremos desde allí, decidí que lo mejor era ponernos, además de las específicas de Asia, la vacuna de la fiebre amarilla.

Se trata de la única vacuna obligatoria para entrar en algunos países, especialmente en países Sudamericanos. De este modo, y con la vacunación que nos pusieron, podemos entrar durante los diez próximos años en cualquier país que la requiera.

Yo no sufrí efectos secundarios por la vacuna, pero Ilze tuvo un buen hinchazón. Debido a esto me dio por buscar información sobre la vacuna en internet… y para mi sorpresa se alertaba de un riesgo de muerte por fallo del hígado, los riñones, el sistema respiratorio y otros órganos. Las posibilidades de fallecer tras tomar la vacuna eran muy reducidas, pero existían; y la doctora que nos la puso no nos informó al respecto, lo cual me sorprendió bastante.

Más vacunaciones para Asia

La lista de vacunas que nos pusimos de cara a nuestro viaje a Asia es extensa, así como el número de pinchazos, ya que la mayor parte de ellas requerían de dos o tres tomas.

Desde la vacuna para la fiebre tifoidea hasta la vacuna para el polio, pasando por la de la rabia, la vacuna para la encefalitis japonesa o la de la Hepatitis A. Hasta aquí todas las vacunas gratuitas que nos recomendaron en el Centro de Vacunación Internacional de Zaragoza, algo que sorprendió especialmente a Ilze, ya que ella está acostumbrada en Letonia a tener que pagar antes si quiera de abrir la puerta del médico.

Además nos recetaron una vacuna para el cólera que debíamos tomar por vía oral. El nombre comercial de la vacuna es Dukoral y resulta bastante agresiva para el estómago, ambos pasamos un día bastante incómodo después de la toma. El precio de la caja tras la subvención de la Seguridad Social era de unos 17€.

Por supuesto las pastillas para la Malaria no faltaron, cargaremos con varias cajas de Malarone. Con la subvención de la seguridad social apenas eran 2 euros y pico. Como vamos a estar entrando y saliendo continuamente de áreas con riesgo de contagio de malaria nos dijeron que no era posible tratarse, y que la única opción era tomarlas a posteriori en caso de resultar infectados. Así que nos tocará extremar las precauciones y comprar una mosquitera cuando lleguemos allí.

¡8 días para ir a París y 11 para Malasia!