Voto de castigo

Voto de castigo

A pesar de las apariencias, el electorado estadunidense no dio un giro a la derecha en las últimas elecciones intermedias, sino que expresó su repudio al manejo del país por la cúpula política y su desaprobación a demócratas y republicanos. La abstención fue del 60%.

Una minoría de votantes acudió a las urnas; los sectores de mayor edad y conservadores otorgaron un triunfo a los republicanos, mientras que las bases más jóvenes y de color, que fueron claves en los triunfos del presidente Barack Obama y los demócratas, participaron en índices muy reducidos. Esto resultó en que los republicanos lograron cosechar un triunfo electoral con base en este desencanto generalizado.

El Pew Research Center concluyó al analizar estos sondeos, que “el resultado de la elección de este año representó un repudio al statu quo, en lugar de un voto de confianza al Partido Republicano o una afirmación de apoyo a sus políticas”.

El hecho de que los republicanos, y dentro de ellos, el nuevo poder del movimiento ultraconservador Tea Party, hayan triunfado electoralmente, sí tendrá implicaciones severas. Primeras consecuencias: Obama descartó su iniciativa para reducir los gases que contribuyen al calentamiento climático. Los republicanos ya han anunciado que buscarán desmantelar en todo lo posible la reforma de salud promulgada por Obama.

Fuente: Viñeta.