13 Días en bicicleta por el centro de Inglaterra

Nuestra aventura invernal recorriendo el centro de Inglaterra en bicicleta fue una buena prueba y entrenamiento de cara a nuestra vuelta al Mundo en bicicleta. Durante 13 días pedaleamos por preciosas ciudades como Lancaster, Newcastle o York; visitamos los lagos del Lake District y subimos colinas y picos en la provincia de Cumbria.

Estas dos semanas fueron una rotura total con la rutina que nos ahogaba en Mánchester, estos últimos meses de ahorro empezaban a dar sus frutos y por fin teníamos tiempo de probar nuestras bicicletas, nuestra equipación y a nosotros mismos en condiciones extremas.

Dos personas, dos bicicletas y 10 alforjas. moviéndonos con dirección Norte desde Mánchester, llevándonos a recorrer un total de 626 Km y a pasar 12 noches en nuestros sacos de dormir.

Preparando las alforjas para nuestro viaje en bicicleta por Inglaterra
Preparando las alforjas por primera vez.

Nuestro primer día nos preocupó, tras preparar todas nuestras alforjas por primera vez y ponerlas sobre las bicicletas Ilze era incapaz de llevar la bicicleta en línea recta, el manillar iba dando bamboleos de un lado para otro. Entre la adaptación a unas bicicletas tan pesadas, la salida de la ciudad con todas las paradas en semáforos que ello conlleva, el viento en contra y la brevedad de las horas de luz en invierno; apenas recorrimos 26 Km aquel día.

¿26 kilómetros el primer día? ¿Y a este ritmo vamos a dar la vuelta al Mundo? ¡Para cuando terminemos vamos a ser ancianos!

Poco a poco fuimos adaptándonos a las bicicletas, poniéndonos en forma y acostumbrándonos a pedalear en condiciones de frío. Pero aún así los días eran cortos; nos costaba comenzar a pedalear ya que nos llevaba tiempo recoger la tienda de campaña, poner las alforjas de nuevo en las bicicletas y cocinar el desayuno con las manos heladas. Raro fue el día que empezamos antes del mediodía, ¡y anochecía entre las 5 y las 5 y media de la tarde!

Aún así acabamos haciendo días de 70-75 Km. Con un poco más de experiencia, días más largos y temperaturas más cómodas no tendremos problema en recorrer más de 100 Km diarios. ¡Eso ya es otra cosa!

Nuestra ruta invernal en bicicleta por el centro de Inglaterra

Mapa de nuestra ruta en bicicleta por el centro de Inglaterra
Mapa de nuestra ruta en bicicleta por el centro de Inglaterra, clic en la imagen para ver el mapa interactivo.

Este mapa os muestra la ruta que llevamos, dado que no hice check-in más de un par de veces diarias las líneas no siguen el serpenteo de las carreteras, pero sirve para hacerse una idea.

  • El primer día apenas salimos de Mánchester, atravesamos Bolton y acampamos cerca de Belmont.
  • El segundo día pasamos Preston y acampamos antes de llegar a Garstang.
  • El tercer día dejamos atrás Lancaster antes de poner la tienda de campaña.
  • El cuarto día entramos en el Lake District y acampamos en Windermere.
  • El quinto día pasamos por Ambleside y Grasmere para acabar durmiendo en Keswick.
  • El sexto día atravesamos Penrith tras un rodeo por los campos nevados.
  • El séptimo día disfrutamos de la montaña y llegamos a Alston.
  • El octavo día pasamos Hexham y seguimos la ruta ciclista 72 que nos llevó hasta Wylam.
  • El noveno día llegamos a Newcastle bordeando el río.
  • El décimo día pasamos por Durham y Darlington para acabar durmiendo en un pueblito cerca de Northallerton.
  • El undécimo día hicimos nuestra entrada en York.
  • El duodécimo día cruzamos Leeds para acabar durmiendo en Brighouse.
  • El decimotercer día regresamos a Mánchester a través de Oldham.

Un total de 626 Km recorridos en bicicleta, con días relajados de 26-35 Km y otros de 60-75Km.

El clima al que nos enfrentamos pedaleando en invierno

Precioso día viajando en bicicleta por Inglaterra
Cuando viajas en invierno por Inglaterra los días soleados se agradecen.

Lluvia, nieve, hielo, viento, temperaturas bajo cero y granizo. Disfrutamos un poco de todo mientras apretábamos los dientes sobre nuestras bicicletas.

Las temperaturas nocturnas fueron bajo cero todas las noches, lo que implicaba despertarse con las cremalleras de la tienda de campaña congeladas, llegando a disfrutar de mínimas de -10 grados. Durante el día tuvimos máximas de de unos 5 grados, incluso los días soleados apenas superaban los 0 grados.

La lluvia nos acompañó durante todo nuestro viaje, afortunadamente sólo nos llovió 3 ó 4 días mientras pedaleábamos, pero por la mañana o a la noche llovía con frecuencia; lo que implicaba despertarse con la tienda de campaña mojada y tardar más tiempo en recoger todas las cosas.

La nieve fue otra de nuestras compañeras, la mitad de los días pedaleamos rodeados de nieve, pero en un par de ocasiones nos nevó con fuerza mientras tratábamos de avanzar en el invierno inglés. Un día no se nos ocurrió nada mejor que tomar una ruta alejada de las carreteras, empezó a nevar y acabamos pedaleando en mitad de un manto blanco de nieve poco menos que monte a través.

Y, por si no fuera suficiente con lluvia y nieve, un día que soplaba un vendaval en dirección contraria a nuestra marcha empezó a granizar con fuerza. Un metralleo constante de piedras de hielo nos acribilló hasta que encontramos refugio en la cima de la colina.

Cómo dormimos durante nuestra aventura invernal en bicicleta

Acampando en una granja en pleno invierno inglés
Durmiendo en la tienda de campaña en una granja

No somos masoquistas, pero queríamos probar nuestra tienda de campaña, sacos de dormir y colchonetas en condiciones invernales. No le veo sentido alguno a pagar por poner tu tienda de campaña, por lo que hicimos lo que se conoce como wild camping o free camping, pusimos nuestra tienda de campaña allí donde pudiéramos sin pagar.

  • La primera noche acabamos acampando en una reserva de agua, en un terreno público de acceso restringido. A la mañana nos despertaron los trabajadores con un “buenos días, pero vete de aquí”.
  • La segunda noche pedimos permiso en una granja y acampamos en uno de sus terrenos.
  • La tercera noche probamos el “knock, knock” de nuevo, esta vez en una casa, dormimos en su jardín y nos invitaron a desayunar y a darnos una ducha por la mañana.
  • La cuarta noche, tras deambular por el Lake District y darnos cuenta de que en zonas tan turísticas era más complicado encontrar lugar donde poner la tienda de campaña, acabamos escondiéndonos en los terrenos de un caserío antiguo. Pusimos el despertador a las 6:30 y salimos de allí antes de que nadie nos viera.
  • La quinta noche hicimos trampa. Era el cumpleaños de Ilze así que su regalo fue una noche en un Bed & Breakfast.
  • La sexta noche pusimos la tienda de campaña en el lateral de un campo de fútbol. Escondidos junto a la caseta de los vestuarios.
Camping en un campo de fútbol en Inglaterra
Durmiendo en la tienda de campaña junto a un campo de fútbol

Nuestra tienda de campaña respondió de maravilla incluso los días que llovió a cántaros y sopló un vendaval, nuestros sacos de dormir también se portaron genial, pero nuestras colchonetas -la única pieza del equipo que no es 4 estaciones- no terminaban de aislarnos del frío del suelo. Yo dormí genial, pero Ilze pasó frío. Esto nos llevó a cambiar de estrategia a partir del ecuador de nuestro viaje.

  • La séptima noche nos encontrábamos en Alston, en mitad de las montañas, la temperatura mínima aquella noche era de -10 grados así que tras descubrir que la estación de tren estaba cerrada y que no podíamos pasar allí la noche, decidimos ir al albergue juvenil.
  • Las 5 noches siguientes las pasamos en la casa de hosts de Warmshowers, el Couchsurfing del ciclista. Pese a escribir mensajes con menos de 24 horas de antelación no tuvimos problemas para encontrar gente que nos abriera las puertas de su casa, nos ofreciera cena y desayuno, y estuviera encantada de compartir experiencias viajeras.

La hospitalidad de los miembros de Warmshowers y el espíritu de sus integrantes nos recordó los mejores momentos de Couchsurfing, antes de que se convirtiera en algo tan global y masificado.

Gastos durante nuestro circuito por el centro de Inglaterra

Calentando los pies tras viajar en bicicleta todo el día
Calentando los pies en el fuego de una taberna.

Lo diré una vez más: ¡viajar es barato! ¡no hace falta ser rico para viajar durante largos periodos de tiempo! Por supuesto, ayuda, y si quieres comodidades extra y seguridad toca sacar la cartera; pero se puede viajar muy barato.

Durante nuestros 13 días de viaje en bicicleta, entre 2 personas gastamos un total de 120 libras (140€ al cambio). Una extrapolación al gasto mensual implicaría que no gastaríamos más de 300€ al mes, ¡no más de 150€ por persona y mes!

  • Nuestro gasto principal fue la comida y bebida, gastando un total de 95 libras en dicho aspecto. El básico y fundamental. La mayor parte de nuestras compras fueron en supermercados, pero un día nos dimos un capricho y gastamos 19 libras en un restaurante. También gastamos más de la cuenta en cafés y cervezas en tabernas y cafeterías, no porque nos hiciera falta la bebida, sino porque era la excusa para pasar una hora en un lugar donde entrar en calor. En verano es otro gasto que nos habríamos ahorrado.
  • El otro gasto fue la noche en el albergue, 25 libras por una habitación para dos personas. Hicimos uso de la cocina, del wifi para buscar hosts con Warmshowers para los siguientes días y de la lavadora para lavar toda nuestra ropa. La noche en el B&B no la cuento ya que fue mi regalo de cumpleaños para Ilze, y no es un gasto que habríamos hecho en otras condiciones, pero fueron 50 libras con desayuno.

Pese a viajar en un país caro como Inglaterra, y en condiciones de frío que te obligan a gastar más, nos las arreglamos para mantener nuestro presupuesto en los mínimos a los que estamos acostumbrados.

Pedaleando en el invierno inglés
Si te mueves pedaleando el transporte sale gratis.